​
​
​
​
Te compartimos algunas fórmulas tradicionalmente preparadas que funcionan
como fungicidas y acaricidas y te ayudarán en el control de plagas a repeler algunos
coleópteros. Recuerda que un mayor o menor ataque a las plantas provocado por insectos
y microorganismos, depende de su estado de equilibrio nutricional.
Recetas:
Caldos Mineral a base de ceniza
​
Ingredientes:
-
Ceniza bien cernida - 2.5 Kilogramos
-
Jabón amarillo de barra - 250 gramos
-
Agua - 10 Litros
Necesitaras:
-
Una Tina o barril metálico
-
Fogón a leña
Procedimiento:
1; Mezclar la ceniza y el jabón (en trocitos) en agua
y llevarlo al fuego por 20 a 30 min hasta que se disuelva el jabón.
​
2; Bajarlo del fuego, dejarlo enfriar y usarlo de forma foliar a una dosis de 1 litro en 20 de agua.
​
3; Observar que reacción tiene en las plantas y compartir.
​
Recomendaciones en cultivos
• Este caldo se puede mezclar con las aplicaciones de los biofertilizantes y los caldos minerales cumpliendo con la función de adherente y al mismo tiempo refuerza la fitoprotección de los cultivos, principalmente todo el sistema de la lámina foliar.
• Su principal función es controlar cochinillas, escamas y el gusano cogollero del maíz.
• Para hacer más eficiente la aplicación de este caldo en el control de los insectos de cuerpo ceroso y escamas, se recomienda prepararlo en la forma de emulsión mineral; agregándole medio litro de petróleo o kerosén a la receta original. El kerosén o el petróleo, de preferencia, debe ser agregado al momento de bajar el recipiente del fuego, cuando el jabón y la ceniza ya estén mezclados.
​
​
Caldo a base de bicarbonato de sodio
​
Ingredientes y materiales:
• 100 gramos de bicarbonato de sodio
• 10 litros de agua
​
Preparación:
Se mezcla directamente el bicarbonato en el agua y se agita hasta obtener una mezcla homogénea y transparente.
Usar en atomizador.
​
Aplicación:
El caldo se aplica puro (sin disolver) en los cultivos, para el control de mildeus o cenicillas y el control del hongo Botritis spp. Principalmente en los cultivos de: calabaza, pepino, uva, estropajo, melón, sandía, fríjol, fresa, tomate, chile, ajo, cebolla y ejote, entre otros cultivos atacados por estas molestias.
​
​
Caldos minerales preparados a base de azufre
​
El azufre es reconocido mundialmente como uno de los más antiguos productos utilizados para el tratamiento de muchos cultivos, su uso se puede remontar hasta el año 3000 a.C., y en Grecia fue largamente pregonado por Hesiodo.
Hoy, de forma industrializada y en diferentes presentaciones, es muy empleado, principalmente para tratar enfermedades en los cultivos como el mildeu y el oidio, más popularmente conocidos como «cenicillas». También controla varios insectos, ácaros, trips, cochinillas, brocas, sarnas, royas, algunos gusanos masticadores, huevos y algunas especies de pulgones.El azufre es un excelente acaricida, y en muchos casos se comporta como un controlador de algunos insectos, como pulgones, coleobrocas o taladradores, huevos y gusanos de muchas mariposas. En la ganadería se utiliza como un excelente controlador de la garrapata y en la producción de cabras se emplea en el control del piojo.
​
Caldo sulfocálcico (azufre + cal)
Control de hongos y plagas en general
*** OJO No aplicar en leguminosas floreando ni en ninguna planta de la familia de las cucurbitáceas porque las QUEMA.***
Ingredientes
Azufre agrícola en polvo (“flor”) - 2 kilogramos
Cal viva (de preferencia) o apagada - 1 kilogramo
Agua - 10 Litros
Una Tina o barril metálico
Fogón a leña
​
Preparación
1. Poner a hervir el agua y cuidar que se mantenga el volumen
2. Mezclar en seco la cal y el azufre y echar sobre el agua hirviendo, teniendo mucho cuidado con el azufre porque si cae en las llamas es inflamable.
3. Revolver constante la mezcla manteniendo el volumen de agua y que el fuego sea fuerte y constante. En aproximadamente 30 a 45 minutos estará listo y veremos que la mezcla toma un color vino tinto o color teja de barro, o color ladrillo anaranjado. Forma una combinación química denominada «polisulfuro de calcio».
4. Dejarlo reposar (enfriar), filtrar y guardar en envases oscuros y bien tapados. Se les debe agregar un poquito de aceite (comestible) para formar un sello protector del caldo, evitando con esto su degradación con el aire (oxígeno) del interior de los recipientes. Puede guardar el caldo sulfocálcico, bien envasado, tapado y protegidos del sol hasta por un año, pero lo más recomendable es utilizarlo durante los tres primeros meses después de la preparación.
Usarlo de forma foliar en dosis de 250 mililitros en 10 Litros de agua. Puede aplicar el caldo sulfocálcico a los cultivos cada 10 días.
En la preparación hay que tener dos precauciones: Mantener el volumen de agua constante y evitar la sobre-cocción. Cuando ésta ocurre, es común observar que el líquido se torna de un color verdoso, debido a la precipitación de azufre coloidal, con la consiguiente disminución de la efectividad del líquido.
5. Pasta sulfocálcica; Después de retirar todo el caldo del recipiente metálico donde se preparó, en el fondo del mismo sobra un sedimento arenoso de un color verde amarillento, como resultado de los restos del azufre y la cal que no se mezclaron durante la preparación del caldo. Este subproducto no se debe descartar, por el contrario, constituye lo que denominamos pasta sulfocálcica, la cual debe homogenizarse y guardarse en recipientes bien cerrados, con un poco de aceite para protegerla de la degradación que puede sufrir.
La pasta se utiliza como cicatrizante para árboles podados o para proteger el tallo de frutales como cítricos y aguacate, de enfermedades que atacan el mismo en la parte baja (cuello o parte cercana al suelo). Mezclar la pasta con agua, se limpia la parte baja del tallo con una tela gruesa y se aplica la pasta con brocha alrededor del mismo.
• No fumigar o aplicar este caldo en los cultivos de fríjol, habichuela, haba u otras leguminosas cuando estén florecidas.
• No aplicar el caldo sulfocálcico a plantas como calabaza, pepino, melón, sandía, chayote (familia cucurbitácea) pues en la mayoría de los casos las quema. La mejor recomendación para controlar las cenicillas de estos cultivos es usar el azufre en polvo mezclado con cal; otra alternativa para el control de las cenicillas sería el caldo a base de bicarbonato de sodio.
OJO No aplicar en leguminosas floreando ni en ninguna planta de la familia de las cucurbitáceas porque las QUEMA.
El caldo sulfocálcico fue empleado por primera vez para bañar animales vacunos contra la sarna, siendo solamente en 1886, en California, comprobada su viabilidad como un producto con características insecticidas. En 1902 esta mezcla pasó al dominio popular y, a partir de esa época, comenzó a ser ampliamente divulgada y usada, principalmente para el control de cochinillas, ácaros, pulgones y trips.
​
​
Cal
Para obtener los mejores resultados es indispensable usar cal viva (CaO) de la mejor calidad. En cuanto más rápidamente se apague la cal, mejor, porque el calor desprendido ayuda a la cocción.
Cuando no es fácil conseguir cal viva (óxido de calcio), se puede usar cal apagada, también llamada de cal hidra o de construcción, pero ésta tiene que ser de la mejor calidad y debe usarse una tercera parte más, por peso, de lo indicado en las fórmulas. La cal vieja, que ha sido apagada al aire, no debe usarse puesto que por la absorción de CO2 se ha convertido en carbonato de calcio (CaCO3).
​
Azufre
Existen varias formas de azufre comercial, como las flores de azufre o sublimado, el azufre común en terrones y el azufre finamente molido. La flor de azufre es la de mejor calidad para la preparación del polisulfuro, pero si el azufre molido está finamente pulverizado, puede usarse, siendo considerablemente más barato. Debe tener del 98% al 99% de pure- za, grado que fácilmente se encuentra en los azufres americanos y también disponibles por la industria.
​
​
Recomendaciones importantes para la aplicación de los caldos minerales:
Todos los caldos deben aplicarse de preferencia en las horas de la mañana, desde las horas hasta las 10 am o bien en las horas de la tarde, después de las 4 p.m., en los horarios más frescos del día.
Antes de aplicar los caldos, se recomienda colarlos o pasarlos por un paño, con la finalidad de evitar la obstrucción de las boquillas de las máquinas fumigadoras.
Les compartimos un link donde encontramos más información: http://www.agricolturaorganica.org/wp-content/uploads/uploads-pubblicazioni/ABC-de-la-Agricultura-organica-Caldos-minerales.pdf